El Capítulo Español de Flebología y Linfología (CEFyL) y la Asociación Cuida Tus Venas (ACTV) instalarán este miércoles, día 14, una consulta móvil en la Plaza San Antón, desde las 16,00 a las 20,00 horas, para prevenir y concienciar sobre la Insuficiencia Venosa Crónica (IVC), una patología cuyas principales manifestaciones son las varices y las piernas cansadas y que, según los últimos datos, afecta a más del 30 por ciento de los españoles.
Así, y según ha informado la ACTV en nota de prensa, un equipo de cirujanos vasculares atenderá las consultas de los ciudadanos y realizará ecodópplers vasculares gratuitos en una carpa instalada en la calle.
El objetivo, como ha recordado el doctor y presidente del CEFyL, Vicente Ibáñez, será detectar de manera precoz posibles casos de Insuficiencia Venosa Crónica y, sobre todo, concienciar sobre esta enfermedad, que en estos momentos está "infradiagnosticada" y supone un "importante problema de salud pública por el descenso de la calidad de vida en las personas que la padecen".
Asimismo, esta iniciativa, que cuenta con el apoyo del laboratorio farmacéutico español Faes Farma, ha visitado Granada, Cádiz, Albacete y Barcelona y recorrerá posteriormente otras ciudades españolas, como son Alicante, Madrid, Gijón, Valencia y Zaragoza.
En esta jornada podrán participar personas de cualquier sexo y edad, ya que, como ha recordado el presidente de la ACTV, el doctor Román Escudero, aunque se tiende a pensar que la Insuficiencia Venosa Crónica y las varices afecta solamente a las mujeres mayores, se trata de una patología cada vez más extendida entre los hombres y los jóvenes debido, especialmente, a la falta de actividad física y al sedentarismo.
Los cirujanos vasculares han recordado que el único modo de diagnosticar de manera adecuada la IVC es realizar al paciente una prueba de exploración venosa con ecodóppler, así ha indicado que "no existen remedios milagrosos" y que ante síntomas como varices o piernas cansadas "el primer paso es visitar al médico".
Además, la ACTV recomienda adoptar medidas de prevención y aplicar "hábitos saludables", en especial con la llegada del verano, ya que el calor influye de manera "muy negativa en la patología y es un factor de riesgo" que se añade a otros como la herencia genética, la vida sedentaria, el sobrepeso, las profesiones que obligan a permanecer largas horas de pie o sentado, los cambios o tratamientos hormonales y el embarazo.