El Grupo Local de Badajoz de Amnistía Internacional ha organizado para el martes 23 de mayo en la capital pacense una conferencia-coloquio con Pascual Bernabé Velásquez, líder indígena guatemalteco y defensor de derechos humanos, así como un encuentro con el alumnado del IES Reino Aftasí para el día siguiente.
Este activista hablará de la situación que sufren "un gran número de defensoras y defensores de derechos humanos en su país", que, como él, se han opuesto a la instalación de hidroeléctricas en sus comunidades y, por ello, "han sufrido acoso, persecución, intimidación y numerosos procesos penales en su contra", según informa Amnistía Internacional Badajoz en nota de prensa.
En concreto, Pascual Bernabé Velásquez tiene 61 años y es un líder indígena Maya Qanjob'al que vive en Huehuetenango (Guatemala). De orígenes indígenas y campesinos, ha dedicado casi toda su vida al trabajo en fincas cafetaleras de la costa Sur de este país de América Central y es un "firme defensor de derechos humanos, del territorio, de la madre tierra y de su identidad como pueblo originario".
Las mismas fuentes han agregado que, "de sus luchas en contra de la instalación de plantas hidroeléctricas en sus comunidades por el potencial impacto negativo de estos proyectos sobre sus derechos humanos, incluido su derecho al consentimiento libre, previo e informado, y al agua", hablará en Badajoz el martes 23 de mayo en dicha conferencia-coloquio abierta a la ciudadanía y que tendrá lugar en el salón de actos del IES Zurbarán a las 19,30 horas.
El día siguiente, miércoles 24 de mayo, a las 10,30 horas, este activista guatemalteco mantendrá un encuentro con el alumnado del IES Reino Aftasí, de la capital pacense.
EN FAVOR DE LA TIERRA
Para el Grupo Local de Badajoz de Amnistía Internacional, "cada día, mujeres y hombres alzan la voz en favor de la tierra, el territorio y el medio ambiente" y "en Guatemala esos defensores y defensoras son enjuiciados, encarcelados, secuestrados, heridos y asesinados".
En algunos casos, ha explicado, se inician procesos judiciales contra ellos "que suponen su detención inmediata sin que puedan gozar de un juicio en libertad y con plenas garantías", "como forma de intimidar, desgastar y criminalizar su labor de defensoría de derechos humanos en asuntos relacionados con la tierra, el territorio y el medio ambiente en Guatemala", según ha podido constatar Amnistía Internacional.
En varios casos, ser parte de un movimiento social o miembro de una organización de derechos humanos que trabaja por los derechos relacionados con la tierra y por el derecho al territorio y al medio ambiente "ha sido tomado como un indicador de responsabilidad penal".
"Lejos de probar la responsabilidad de los defensores y defensoras en los hechos, las autoridades asumen que la pertenencia a un grupo, o la participación en una manifestación, automáticamente convierte a las personas defensoras en responsables de los hechos por los que se les acusa", ha lamentado.
También ha agregado que considerar a organizadores o participantes de una manifestación "como responsables de conductas ilegales de terceros, o como responsables del orden público durante las mismas, es contrario a los estándares internacionales de derechos humanos".
Desde Amnistía Internacional han solicitado a los gobiernos que "reconozcan, protejan y hagan justicia a las defensoras y defensores del planeta Tierra", así como "unión para protegerlos y para denunciar públicamente estas violaciones de derechos humanos".
Finalmente, ha recordado que este acto forma parte de una nueva campaña global de Amnistía Internacional España, denominada 'Valiente' y que tiene por objeto "detener la ola de ataques hacia quienes luchan contra las injusticias y defienden los derechos humanos". El pasado año perdieron la vida 281 personas por defender los derechos humanos, frente a las 156 que murieron en 2015, concluye el comunicado.
