La capital pacense amortizará sus préstamos mediante 10 millones de euros con cargo al remanente de tesorería que permitirán que la ciudad liquide su deuda gracias al acuerdo entre Partido Popular y Ciudadanos y que hoy además ha contado con el apoyo del Partido Socialista.
Así, este jueves, han salido adelante tres operaciones económicas de importancia para la ciudad; la primera de ellas la amortización de la deuda, que convierte a Badajoz en ‘’una de las grandes ciudades saneadas de España’’ al saldar con 10 millones de euros el préstamo del Ayuntamiento.
La segunda operación tiene que ver con el pago de facturas que ‘’llegaron tarde’’ y con el abono de parte del complemento de localización de los Bomberos por valor de 800.000.
Mientras que la tercera operación será el lanzamiento de un nuevo Plan de Impulso, dotado con 14 millones de euros -lo que para el alcalde representa una "cifra histórica que se ha conseguido gracias a la buena gestión económica del Consistorio pacense"-.
Con el plan de 2018, un total de 2,3 millones de euros se dedicarán a la mejora de infraestructuras de agua y 2,4 para el arreglo de calles y aceras, entre otras inversiones.
Las operaciones han sido aprobadas finalmente por el Partido Popular, Partido Socialista y Ciudadanos mientras que Podemos Recuperar Badajoz se ha abstenido y el concejal no adscrito Luis Garcìa-Borruel ha votado en contra.
Por otro lado, en el capítulo de mociones, ha salido adelante la presentada por el Grupo Municipal Podemos Recuperar Badajoz para la mejora de las condiciones térmicas y ambientales de los centros educativos extremeños. Una moción que ha contado con el apoyo de todos los grupos, a excepción de los socialistas que se han abstenido.
También se ha dado luz verde a la moción del grupo municipal socialista para que se proceda a la limpieza de solares de conformidad con la ley 15/2001, y se ha rechazado otra, presentada por Podemos, para municipalizar la gestión del albergue el Revellín.
En este punto, la formación morada ha defendido que el albergue ha resultado una actividad absolutamente ‘’deficitaria’’ para la ciudad en una cantidad aproximada de 700.000 € tras 4 años de explotación a cargo de una empresa privada en régimen de concesión.
Su propuesta contemplaba que la gestión del albergue y los locales que se ubican en la misma instalación fuera de carácter municipal o que la promoción, además de proyectarse al público en general como se hace en la actualidad, se promocionase de manera especial en todas las organizaciones de discapacitados de España, ofreciendo por ejemplo descuentos y paquetes opcionales, lo que previsiblemente según ellos, redundaría en un mayor índice de ocupación al habido hasta el momento.